lunes, 4 de abril de 2016

¿Un Fantasma en Peracense?

Se ha puesto en contacto con nosotros el representante de la empresa propietaria del castillo para informarnos que tiene un grupo de visitantes que tienen miedo se aparezca un fantasma en el castillo el día que tienen pensado visitarlo. Al ser un grupo de muchas familias con niños de primaria, temen que los niños no quieran visitar el castillo o pasar del primer recinto. Nos montamos en nuestro carromato temporal medieval para ir a investigar y evitar que pueda haber ningún tipo de incidente.
¡Que mala fama tienen los castillos antiguos!

Angosto acceso
Peleando con el hielo
Nos recibió una gélida mañana, pero con sol y sin nubes. Lo primero que había que hacer era reconocer la parte mas externa del castillo (la caballeriza, el primer y segundo recinto) antes de que vengan los visitantes y asegurar los accesos.

¡Había placas de hielo en las zonas donde no daba el sol.!

En el aljibe no está
Después de eso empezamos a buscar en sitios menos evidentes. En los edificios, en la falsa torre del homenaje, en la cocina, en la ermita, en la capilla, en la habitación del señor, en los diferentes aljibes. Nada no hemos encontrado nada, por lo que avisamos a los propietarios para que autorizaran la entrada al castillo y diera comienzo a las visitas.
Toma capón
Ocupados como estábamos en buscar a ese fantasma nos olvidamos de algo muy importante, comprobar que nadie extraño a nuestro grupo se hubiera colado y precisamente ese despiste es el que la reencarnación de Sancho de Antillon aprovechó para colarse en el castillo e intentar recuperar el castillo en el que en su día fue tenente.

Charla
Nuestro compañero puede dar fe del momento en que fue descubierto.Pues con los visitantes ya dentro del castillo solo nos queda actuar como si no pasara nada para que no se asustaran los niños y hacerles creer que era uno mas de los nuestros, aunque les avisábamos de que tuvieran cuidado con el "señor" del castillo que lo trataran con educación y respeto porque tenia muy mal genio. Así que ahí estamos, explicando como era la vida en un castillo del siglo XIII con nuestras muestras tomadas en las diferentes inmersiones temporales. Incluso el mismo Sancho de Antillon hacía acto de presencia para explicar que era "su" castillo, que eran "sus" tierras, e incluso decidió explicar como se vestía un noble en el día a día o como se vestía para la guerra.

Así que finalmente cuando estábamos en la explanada nuestro mejor luchador retó a combate singular a la reencarnación de Sancho.
¡Oh, Tiene un hacha!
Te preguntarás amable lector como acabó el combate y como acabó la historia.... Pues no acabó bien tendremos que esperar hasta la próxima aventura en Peracense.